jueves, 12 de diciembre de 2013

LOS LIDERES EUROPEOS SON TAN ESTUPIDOS COMO EN 1914

LOS LIDERES EUROPEOS SON TAN ESTUPIDOS COMO EN 1914:

El año que viene se cumplirán cien años del comienzo de la Primera Guerra Mundial y el mundo se llenará de libros y especiales que recordarán una fecha que cambió la historia. El escritor Max Hastings, conocido por su labor como historiador y sus libros sobre la Segunda Guerra Mundial, publica ahora 1914, el año de la catástrofe (Editorial Crítica), una obra que intenta indagar en los verdaderos motivos que desembocaron en un siglo de conflictos bélicos. El autor acude puntual, como buen Caballero de la Orden del Imperio Británico, a su entrevista con este periódico e incluso actúa como si él fuera el anfitrión, educado y preocupado por todas las personas sentadas en la mesa. Una conversación que nunca se queda estancada en 1914, sino que llega hasta la crisis que asola Europa en la actualidad.
¿Por qué decide revisitar la Primera Guerra Mundial?
Era obvio que por el centenario iba a haber mucho interés en 1914, pero siempre intento contar a la gente algo que no sepan, y encontré cosas que podían interesar. La primera de ellas es que todavía existe el sentimiento de que la Segunda Guerra Mundial fue una guerra buena, que tuvo que ser luchada, pero que la primera fue fútil, que no sirvió para nada. Eso no es verdad, la guerra fue una catástrofe para Europa, pero había una causa por la que se luchaba.
Se decía que era una guerra para acabar con todas las guerras. ¿Qué pasó para que no fuera así?
Sir Max Hastings, autor de '1914, El año de la catástrofe'
Efectivamente, eso es lo que se les decía a todos. Cuando acontece la Segunda Guerra Mundial, en Francia y Reino Unido existe una sensación de desilusión, porque había fracasado lo que se había dicho tras la Primera Guerra Mundial. Y es también por ello por lo que se crea esa visión de que existió una guerra mala y una guerra buena.
En su libro expone que uno de los principales problemas fue que al terminar el conflicto no se asumieron responsabilidades.
En Reino Unido hay una creencia de que el Tratado de Versalles de 1919 fue muy injusto hacia Alemania, pero la verdad es que intentaron hacer algo muy difícil: reconstruir el mundo. Los estudiosos de Versalles dicen que no es verdad que el tratado fuera cruel con Alemania. Por ejemplo, respecto al dinero los alemanes acabaron pagando a los franceses menos que lo que los franceses pagaron a los alemanes en 1871, además fueron obligados a desmilitarizarse, cosa que no hicieron. Los mejores académicos creen que los problemas económicos de Alemania en los años 20 y 30 que provocaron el ascenso de Hitler fueron el resultado de las desastrosas políticas económicas del gobierno de posguerra, no del tratado de Versalles.
¿Cree que los gobiernos han aceptado a posteriori esas responsabilidades?
Un  corresponsal de guerra australiano escribió una vez que en Alemania en 1945 no había encontrado sentido de la culpabilidad, pero sí un gran sentido de la derrota porque los alemanes podían ver que su país había sido aplastado. En contraste, en 1918 no se había habido luchado dentro del país, por lo que no tenían una sensación real de la derrota, y por tanto tampoco una sensación de la culpabilidad.
Merece la pena decir que existe un punto en común entre la Alemania de 1914 y la de ahora. Actualmente son una gran democracia y no hay amenaza de una guerra europea, pero el continente tiene la misma preocupación que hace años: ¿cómo vivimos con un estado que es mucho más rico y poderoso que cualquier otro?
¿Una posguerra diferente hubiera evitado la Segunda Guerra Mundial?
Los historiadores es mejor que nos ciñamos a los hechos, pero lo que es cierto es que la Segunda Guerra Mundial surgió del hecho de que los alemanes no habían aceptado el veredicto militar de la primera, pero nada en la historia es inevitable.
Soldado en la Primera Guerra Mundial (Archivo Europeana)

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